Entre los papeles que celosamente guardaba mi padre, he encontrado el acta fundacional y el proyecto de reglamento del Centro de Iniciativa y Turismo de Madrigalejo, con fecha de 12 de abril de 1975. Los Centros de Iniciativas Turísticas (CIT) son asociaciones sin ánimo de lucro destinadas a la promoción y desarrollo de las actividades turísticas y a la defensa del patrimonio cultural, con ámbito generalmente local o comarcal. Sin duda, la iniciativa de crearlo en Madrigalejo tenía como referente el CIT de Trujillo.
El CIT de Trujillo se creó el 28 de octubre de 1968 y fue el antecedente de la actual “Asociación Cultural Coloquios Históricos de Extremadura”, pues la actividad central del CIT trujillano fueron los “Coloquios Históricos”, que nacieron en 1971[1]. Por tanto, se cumplen ahora 50 años de su creación. Y desde los primeros “Coloquios Históricos de Extremadura”, Madrigalejo estuvo presente en ellos con el trabajo presentado n 1971 por mi padre, Lorenzo Rodríguez Amores, titulado “La Casa de Fernando el Católico en Madrigalejo”, un trabajo reivindicativo del estado ruinoso en el que se encontraba entonces la Casa de Santa María.
Acta
fundacional del CIT de Madrigalejo
Precisamente,
entre sus fundadores, tenían muy presente el lamentable estado en el que se
encontraba la histórica casa y, además, querían potenciar el hecho de la muerte de Fernando el
Católico en nuestra localidad.
Así
lo dice en su acta fundacional: “...Considerando que esta población puede y tiene
posibilidades de ser núcleo o zona para la promoción del turismo en ella y su
zona de influencia por haber fallecido en ella el Rey Fernando el Católico,
porque está situada geográficamente en ruta de la provincia de Cáceres para el
acceso a los pantanos de Orellana, García Sola y Cijara, en los que abunda toda
clase de pesca y además se practican ya muchos deportes náuticos y porque
también en la comarca, debido a la transformación de terrenos de secano en
regadío, prolifera mucho la codorniz y otras aves para la práctica de la caza
(…) acordaron por unanimidad la creación o fundación del CENTRO DE INICIATIVAS
TURÍSTICAS DE MADRIGALEJO (…)
La
relación de socios fundadores fue la siguiente: Pilar Carrero Gutiérrez, Simón
García Carranza, Luis Rodríguez García, Julián Arroyo Carranza, Andrés
Rodríguez García, Manuel Fernández, Magdalena Sánchez Rodilla, Eulogio Recuero
Cerezo, Carmen Álvarez, Magdalena Viñuelas Soto, Inés Mª Serrano, Virilo
Naharro Moreno, Josefa Recuero Cerezo, Gonzalo Gómez Lozano de Sosa, Ana Mª
Cerezo, Josefa Sojo Cano, Manuel Pérez, Josefa Rodríguez Cerezo, Lorenzo
Rodríguez Amores, Francisco Roldán Cuesta, Francisco Flores y Francisco
Cabrera.
La
primera junta directiva del CIT de Madrigalejo fue:
PRESIDENTE:
Lorenzo Rodríguez Amores.
SECRETARIO:
Josefa Sojo Cano.
VICEPRESIDENTE:
Magdalena Sánchez Rodilla.
TESORERO:
Julián Arroyo Carranza.
CONTADOR:
Francisco Flores.
VOCAL
1º: Magdalena Viñuelas Soto.
VOCAL
2º: Andrés Rodríguez García.
VOCAL
3º: Inés Serrano.
VOCAL
4º: Manuel Pérez.
VOCAL 5º: Manuel Fernández.
Proyecto
de reglamento para el CIT de Madrigalejo
El
proyecto de reglamento era lo que hoy llamamos estatutos. Constaba de 6
capítulos:
El
capítulo I trata de la denominación y sus fines; el capítulo II es sobre los
socios; el capítulo III aborda la reglamentación del régimen interno; el
capítulo IV atiende a la reglamentación de los cargos; el capítulo V incluye
los acuerdos del CIT (cuotas, financiación, presupuestos, fondos sociales…), y,
en el capítulo VI, se encuentran las disposiciones generales.
Me ha parecido interesante que nos detengamos en los fines del CIT de Madrigalejo. Así, en el
artículo II del capítulo I, aparecen especificados de esta manera:
-La
atracción de forasteros, procurando, a estos, toda clase de facilidades, a fin
de que su estancia les resulte grata.
-Proporcionar
a los turistas que visiten Madrigalejo los datos que puedan serles de utilidad
para el mejor conocimiento de su jurisdicción.
-Fomentar
el excursionismo.
-Difundir
el conocimiento de sus características en arte, arqueología, bellezas
naturales, manifestaciones folklóricas, etc. por los medios de propaganda que
estime conveniente. La propaganda gráfica o escrita que se proyecte, deberá
someterse a la aprobación de la Dirección General de Promoción del Turismo.
-Cooperar
a la organización de fiestas, excursiones y demás certámenes.
-Formular
iniciativas cerca de entidades públicas y privadas para acrecentar las bellezas
de todo orden de su jurisdicción y proponer las mejoras necesarias o
convenientes en servicios públicos que el turista haya de utilizar, sobre los
cuales ejercerá una acción vigilante y continua.
-Establecer
relaciones con organismos análogos.
-Asesorar
al organismo turístico estatal en cuantos asuntos le sean sometidos por el
mismo.
En definitiva, se trataba de promocionar turísticamente la localidad de Madrigalejo y, con ello, incentivar el conocimiento de nuestro patrimonio, ya fuera artístico, arqueológico, cultural, histórico, su naturaleza o su folklore. Llama la atención que cualquier tipo de propaganda debía estar sometida a la aprobación de la Dirección General de Promoción del Turismo. No olvidemos que estamos en 1975, todavía en tiempos de la Dictadura, y los organismos oficiales controlaban todo tipo de asociacionismo.
Programa
de actuación
Con
los documentos anteriores, también se encuentra un guion base sobre las
actividades que se iban a desarrollar inicialmente y su programa de actuación futura,
que estaba basado en seis pilares: actividades culturales, actividades
deportivas, espectáculos, promoción de zona turística, relación con organismos y
actividades religiosas.
Los objetivos de las actividades culturales eran la organización de la
biblioteca, del coro de la iglesia, de una rondalla y de un grupo de teatro,
además de potenciar los coros y danzas y una cátedra de la sección femenina. Las
actividades deportivas estarían encaminadas a la organización del equipo de futbol,
el control y organización de la piscina, de campeonatos de natación, de tenis,
tenis de mesa, etc., así como crear un club de vela y otro para realizar
excursiones. En la sección de espectáculos, estaría realizar un programa de
teatro, la programación de fiestas y un baile semanal en la piscina. La promoción de zona turística se enriquecería con la excavación de Lacipea, la restauración
de la casa de la Casa de Santa María (entrando en contacto de la Institución
Fernando el Católico, perteneciente a la Diputación de Zaragoza) y apoyar la
Ruta de la Hispanidad (Camino a Guadalupe). Y, por último, en las actividades
religiosas, entraría la promoción de nuestro patrón.
Toda esta documentación fue enviada a la delegación Provincial del Ministerio de Información y Turismo, concretamente a la Dirección General de Ordenación del Turismo.
Lástima
que no prosperara la iniciativa
Como
se ha podido ver, era un proyecto ambicioso y con gran visión de futuro.
En
los Coloquios Históricos de Extremadura celebrados ese mismo año -1975-, dos
socias fundadoras del CIT de Madrigalejo presentaron un trabajo en colaboración
titulado “Mujeres de las crónicas trujillanas”, firmado por Josefa Rodríguez
Cerezo y Magdalena Sánchez Rodilla. Y en esos años en los que se estaba
peleando para dar soluciones para el lamentable estado en el que se encontraba
la Casa de Santa María, el CIT fue otra fuerza de apoyo para intentar que fuese
declarada Monumento Nacional y para procurar tan necesaria restauración.
Fueron
22 los socios fundadores, entre los que se encontraba el alcalde, D. Francisco
Roldán Cuesta. Mujeres y jóvenes estuvieron muy presentes tanto en su fundación
como en los cargos de su junta directiva. Algunos de aquellos jóvenes pronto
abandonarían Madrigalejo para seguir en otros lugares su vida profesional y
familiar. Además, el CIT se creó en un momento en el que se iban a iniciar
importantes cambios políticos en nuestro país y esta asociación aún no estaba
lo suficientemente asentada para asimilar las profundas transformaciones que se
iban a producir.
Sin
embargo, a pesar de su corta existencia, el CIT de Madrigalejo ejerció una gran
labor dinamizadora de la vida socio-cultural de Madrigalejo.
Guadalupe Rodríguez
Cerezo
La casa de Santa María fue declarada Monumento Nacional el 2 de abril de 1980. Durante esos años, fue adquirida por Hidroeléctrica Española y restaurada a su cargo por D. Miguel de Oriol. En 1982 la Casa de Santa María ya estaba estaurada.
ResponderEliminarBuen reportaje y bien documentado, como siempre, gracias..
ResponderEliminarMuchas gracias,
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